La sentencia de la Corte de Casación del 20 de junio de 2018, n. 28561, aborda temas delicados relacionados con la libertad individual y la protección de menores. En particular, la Corte ha confirmado la condena de G.R., G.L. y C.G. por actos de acoso y por la sustracción de la menor D.S., destacando cómo la protección de los menores debe prevalecer sobre los conflictos familiares. Esta sentencia ofrece importantes reflexiones para abogados y padres involucrados en controversias de este tipo.
La Corte de Apelación de Lecce había confirmado la condena de primera instancia, considerando que el comportamiento de los imputados había generado un grave estado de ansiedad en las personas ofendidas. Los recurrentes sostuvieron que no se había demostrado un estado patológico, pero la Corte reiteró que tal condición puede deducirse de las palabras de las víctimas, siempre que se evalúe su credibilidad.
La sentencia reiteró que el grave estado de ansiedad no debe necesariamente ser verificado a través de exámenes médicos, sino que también puede evaluarse en base a máximas de experiencia.
En el recurso, los imputados plantearon numerosas excepciones, incluida la falta de prueba del daño psicológico y la interpretación errónea de las normas penales. Sin embargo, la Corte consideró inadmisibles los argumentos, subrayando que la conducta de los imputados estaba dirigida a sustraer a la menor del padre, violando las disposiciones del Tribunal.
Además, la Corte aclaró que la sustracción de un menor es un delito grave, y que la legislación italiana, en particular el art. 574 c.p., es clara al castigar tales comportamientos. A pesar de las objeciones de los imputados, la Corte confirmó que el elemento psicológico había sido correctamente considerado.
La sentencia n. 28561 de 2018 de la Corte de Casación se presenta como una importante reflexión sobre la necesidad de proteger a los menores en situaciones de conflicto familiar. La jurisprudencia italiana es clara en perseguir a quienes intentan eludir las disposiciones judiciales en materia de custodia y visitas de menores. Es fundamental que los abogados y los padres comprendan la importancia de actuar en respeto a las normativas vigentes para garantizar el bienestar de los menores involucrados.