La sentencia de la Cassación ofrece puntos significativos sobre la configuración de la corrupción y de la concusión, destacando los mecanismos corruptos y las responsabilidades penales de los funcionarios públicos involucrados en actos contrarios a los deberes del cargo.
La reciente sentencia del Tribunal de Casación sobre el peculado destaca las complejidades relacionadas con la apropiación de bienes públicos por parte de funcionarios públicos, subrayando la importancia de una correcta reconstrucción de los hechos y de las responsabilidades legales.