Descubrir que el otro progenitor ha llevado a su hijo al extranjero sin autorización es una experiencia traumática que requiere una acción legal inmediata y competente. La sustracción internacional de menores no es solo un acto que viola los derechos del otro progenitor, sino sobre todo un evento que desestabiliza profundamente la vida y el bienestar psicofísico del niño. Como abogado experto en derecho de familia en Milán, el abogado Marco Bianucci comprende la profunda angustia y la urgencia que estas situaciones conllevan, ofreciendo un apoyo legal enfocado en obtener el rápido regreso del menor.
La normativa de referencia en estos casos es el Convenio de La Haya del 25 de octubre de 1980 sobre los aspectos civiles de la sustracción internacional de menores. Este tratado internacional, ratificado por numerosos países, incluida Italia, tiene como objetivo asegurar el retorno inmediato de los menores ilícitamente trasladados o retenidos en un Estado contratante y garantizar que los derechos de custodia y visita existentes en un Estado sean respetados en los demás. El objetivo principal es restablecer la situación anterior al traslado, para que sea el juez del Estado de residencia habitual del menor quien decida sobre las cuestiones relativas a su custodia.
Abordar un caso de sustracción internacional requiere no solo un profundo conocimiento del Convenio de La Haya, sino también una estrategia legal reactiva y personalizada. El enfoque del abogado Marco Bianucci, abogado con sólida experiencia en materia de sustracción internacional de menores en Milán, se basa en dos pilares: la intervención inmediata y una estrategia a medida. El primer paso consiste en activar sin demora el procedimiento de cooperación internacional, presentando la solicitud de retorno ante la Autoridad Central designada por el Ministerio de Justicia.
Paralelamente, el despacho analiza cada detalle del caso para construir una sólida argumentación legal que presentar al juez extranjero. Se evalúan elementos cruciales como la prueba de la residencia habitual del menor en Italia, la ausencia de consentimiento para el traslado y la inexistencia de excepciones que pudieran obstaculizar la repatriación. El objetivo es proporcionar a las autoridades extranjeras un panorama claro e inequívoco de la situación, demostrando que el regreso del menor a su entorno familiar y social es de su interés superior, principio fundamental de todo procedimiento que le concierna.
La primera acción a realizar es contactar inmediatamente a un abogado experto en derecho de familia para evaluar la situación. Es fundamental recopilar toda la documentación útil, como certificados de nacimiento, resoluciones de separación o divorcio, pruebas de la residencia habitual del menor en Italia (por ejemplo, inscripciones escolares, certificados médicos) y denunciar el hecho a las autoridades policiales. El abogado se encargará luego de redactar y presentar la solicitud de retorno ante la Autoridad Central competente.
El Convenio de La Haya prevé que los procedimientos se traten con la máxima urgencia. El objetivo teórico sería llegar a una decisión dentro de las seis semanas posteriores a la recepción de la solicitud por parte de la autoridad judicial extranjera. Sin embargo, la duración efectiva puede variar significativamente según el Estado en el que se encuentre el menor, la complejidad del caso y posibles recursos. La prontitud en la activación del procedimiento es un factor crucial para acelerar los plazos.
Sí, pero solo en circunstancias excepcionales y rigurosamente definidas por el Convenio. La repatriación puede ser denegada si ha transcurrido más de un año desde el traslado y el menor ya se ha integrado en el nuevo entorno, si existe un riesgo fundado de que el regreso lo exponga a un peligro físico o psicológico, o si el propio menor, cuando haya alcanzado una edad y un grado de madurez adecuados, se opone al regreso. Se trata de excepciones que deben ser probadas de manera rigurosa por la parte que las invoca.
La residencia habitual no coincide necesariamente con la residencia registral o la ciudadanía. Es un concepto de hecho que indica el lugar donde el menor tiene el centro efectivo de su vida y sus intereses. Para determinarla, se consideran la duración, la regularidad y las condiciones de la estancia en un determinado Estado, la integración escolar y social, los lazos familiares y los conocimientos lingüísticos. Es el lugar que el niño percibe como su hogar.
Si está enfrentando la dramática situación de una sustracción internacional de un menor, es fundamental actuar con la máxima prontitud y con el apoyo legal adecuado. El abogado Marco Bianucci ofrece su consolidada experiencia para analizar su caso y definir la estrategia más eficaz para obtener el regreso de su hijo. Contacte al despacho de abogados en Milán para recibir un primer dictamen legal y comprender cuáles son los pasos concretos y urgentes a tomar para proteger a su hijo.